- - Realiza ejercicio a diario de forma moderada durante al menos 30 minutos y mantente activo a lo largo del día.
- Reduce el consumo de grasas saturadas de origen animal, vísceras, quesos curados, comida rápida y huevos.
- Elimina las grasas trans de origen vegetal de alimentos como galletas, margarinas y todo tipo de bollería.
- Limita tu consumo de alcohol.
- Evita fumar.
- Sustituye la sal en tus platos por especias y otros condimentos.
- Consume alimentos ricos en fibra soluble como los cereales de grano entero o las legumbres.
- Aumenta la cantidad de frutas y verduras en tus comidas.
- Come alimentos ricos en ácidos grasos omega-3,
como nueces, salmón, atún yogurt o leche.